Un mercado de Holanda se convierte en atracción turística y obra de arte.
Los tradicionales mercados holandeses siempre han sido ambulantes, compuestos de puestos al aire libre y generalmente ubicados en una plaza, con una frecuencia de un día a la semana.
El nuevo mercado Markthal que se ha creado en Rotterdam es el primer mercado cubierto en los Países Bajos, con la particularidad de que aloja además 228 apartamentos dispuestos en forma de arco sobre su patio interior. En la planta baja y en el primer piso del arco se ubican tiendas de alimentos y restaurantes y en el patio interior se encuentran los puestos de alimentos. Este espectacular edificio se ha construido en barrio Laurenskwartier, en el centro de Rotterdam y forma parte de un proyecto global para la reurbanización de este barrio histórico.
Un auténtico mercado estilo mediterráneo
Un centenar de puestos de productos frescos forman el corazón del Markthal Rotterdam. Hay espacio para aproximadamente sesenta empresas de una amplia variedad de sectores alimentarios. Desde emprendedores apasionados por los productos frescos y de cercanía hasta las empresas de cadena nacionales. En el sótano de este singular edificio se ubica un enorme supermercado.
Con el fin de conseguir un buen equilibrio entre todo lo que se ofrece, se agrupan los grupos de productos:
- El pan y los productos lácteos en el centro de la sala.
- Pescado y carne en diagonal uno frente al otro.
- Las verduras, frutas y productos gourmet en la otra diagonal.
- Cuatro puestos de productos frescos independientes repartidos por el mercado para los productos de temporada u ofertas especiales (por un día, una semana o un mes).
- Espacio para las flores y plantas y puestos para desayunar, comer y cenar bajo un mismo techo.
A prueba de las inclemencias del tiempo
Los extremos del arco se han cerrado con enormes paredes de cristal, soportados por una rejilla de vigas de acero. De esta manera se ha creado un refugio que ofrece la protección de los elementos y del frío al mismo tiempo asegurándose de que el edificio parece estar abierto al mundo exterior.
En el interior colorido del Markthal, los artistas Arno Coenen y Iris Roskam han producido “El cuerno de la abundancia”, una obra que cubre más de 11.000 metros cuadrados con imágenes de alimentos, flores e insectos, que recuerdan las obras de pintores holandeses del siglo XVII. Las imágenes fueron creadas en ordenador e impresas en alta resolución sobre paneles de aluminio.
Una arquitectura integrada
Lo más sorprendente de este mercado cubierto es que el majestuoso techo abovedado de este nuevo templo de la alimentación está habitado. Está formado por un bloque de 228 apartamentos, que se asoman por un lado hacia el exterior y por el otro lado sobre el patio del mercado. Así, desde dentro del mercado, mirando la cubierta decorada se pueden observar las ventanas de los apartamentos, integradas en las imágenes de frutas y verduras. La enorme estructura exterior dispone de ventanas y balcones a lo largo de sus 120 metros de laterales, que terminan en una enorme fachada acristalada.