Los pinchos morunos son, curiosamente, típicos del sur de España. El origen de esta receta no está claro, pero al parecer, podría ser bereber (pueblo cuya influencia se extiende tanto por el Magreb como por la antigua Al-Ándalus): por esta razón, en nuestro país se estos sabrosos tentempiés son conocidos como “pinchitos morunos”.
Es sorprendente que ese nombre suela darse a un plato elaborado, por lo general, con cerdo, alimento prohibido para los musulmanes. Pero todo tiene una explicación: en los países árabes, en realidad, es habitual elaborar los pinchitos con cordero o ternera. En cambio, en nuestro país el cordero tiene un sabor más fuerte y la ternera una carne más dura, por lo que se suelen elaborar con cerdo o pollo. Todo depende del método de cría y sacrificio del animal.
Existe una modalidad marinera muy sabrosa: el pinchito de gambas, en el que se sustituye la carne por gambas (o langostinos) pelados.
Receta de pinchitos morunos con harissa
Ingredientes:
- 600 gr. de carne magra de cordero o ternera
- 20 gr. (2 cucharadas) de pimentón picante
- 10 gr. (1 cucharada) de comino molido
- 90 ml. de vinagre
- Sal
- Pimienta blanca molida
- 5 ml. (1 cucharadita) de harissa (opcional; es muy picante)
- 60 ml. de aceite de oliva.
Preparación:
- Cortar la carne en dados del tamaño de un bocado: es decir, de aproximadamente 2 centímetros de lado.
- Mezclar el vinagre, el pimentón, el comino, sal y pimienta. Cubrir la carne con esta mezcla y dejar macerar dentro del frigorífico, tapada, durante un tiempo inferior a veinticuatro horas. Cuanto más tiempo se mantenga el marinado, más penetrará el sabor de la carne en la salsa. Por lo general, ocho horas es el tiempo ideal, aunque en caso de no disponer de tanto tiempo, podría ser suficiente con tres horas.
- Pinchar cuatro o cinco dados de la carne marinada en brochetas metálicas. Rociar la carne con aceite y asar las brochetas a la plancha o a la parrilla, a fuego suave, hasta que estén hechas. Antes de darles la vuelta, rociar nuevamente con más aceite.
- Servir los pinchitos calientes, acompañados por una canastilla de pan y una bebida bien fría.